Presentamos Minorsens en la FAO
El pasado febrero, la coordinación del proyecto presentó Minorsens en la Conferencia Internacional “Perspectivas Mundiales sobre las Indicaciones Geográficas” de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) que tuvo lugar en Roma. Durante la sesión “Cambio climático y biodiversidad”, Enrique Barajas, de ITACYL, defendió la importancia de estudiar y preservar las variedades minoritarias de vid como una herramienta para adaptar la viticultura al cambio climático. El evento fue un escaparate único para visibilizar el trabajo que estamos haciendo en la zona transfronteriza entre España y Portugal para recuperar variedades de vid autóctonas con las que elaborar vinos únicos, frescos y capaces de revitalizar socioeconómicamente su zona de origen.
El investigador Enrique Barajas presentando Minorsens en la FAO
Presentación de Minorsens a viticultores y bodegueros de la zona transfronteriza
El 28 de abril presentamos Minorsens y sus avances a bodegueros, viticultores y representantes de algunos de los consejos reguladores de las denominaciones de origen de la zona transfronteriza. El evento tuvo lugar en las casas del Tratado de Tordesillas, Valladolid, lugar emblemático para las relaciones entre España y Portugal, ya que allí fue donde se estableció el reparto del Nuevo Mundo en 1494. La jornada constó de dos partes: una serie de ponencias de la mano de los principales investigadores que están trabajando en el proyecto y una cata de vinos monovarietales elaborados con algunas de las variedades minoritarias que estamos estudiando. Tuvimos la oportunidad de conocer las peculiaridades de variedades poco conocidas de Castilla y León como Legiruela, Puesta en Cruz, Gajo Arroba, Puesto Mayor, Estaladiña o Cenicienta y de la región Norte de Portugal como Samarrinho, Tinta Gorda, Cornifesto o Tinto Cão. Todo un intercambio de conocimientos y experiencias en cuanto al manejo en campo, elaboración en bodega y aceptación por parte del consumidor final.
Contamos con la participación de más de una treintena de profesionales del sector vitivinícola que nos aportaron un valioso feedback sobre las singularidades que apreciaban de cada variedad. Es fundamental contar con la opinión de todos los implicados para seguir desarrollando soluciones que realmente impacten en el territorio y ayuden a dinamizar la economía de la zona. Somos muy positivos sobre lo que podemos aportar gracias a estas variedades que estamos rescatando y poniendo en valor. Estamos obteniendo vinos frescos, singulares y equilibrados que pueden diferenciarse en el mercado y que pueden abrir nuevas opciones en un mercado competitivo y que cambia día a día.